La pandemia empeora en Latinoamérica. Ante la falta de vacunas y la insuficiente atención sanitaria, las muertes y los casos de contagio aumentan entre los más frágiles. Son millones las personas las que sufren de carencia material severa y en nuestros proyectos, la mayoría lo tiene muy difícil para conseguir alimentos,
productos de higiene y medicinas.
Fieles a la misión, en MISOL continuamos enviando el apoyo económico necesario para que todos y todas las responsables ayuden a las personas cercanas a los proyectos a salir adelante. En Bolivia, las hermanas Mª José Febrero, Antonia Barrilero, Silvia Márquez y Raymunda Zelaya, trabajan por los más pobres junto con Ronald Chambi, laico en misión compartida. En Perú, las hermanas Catalina Vallespir y Justa López junto con los equipos pedagógico y administrativo del I.E. Tono Real Vicens hacen lo imposible por seguir adelante con el curso escolar. En España, a través de los directores y equipos directivos de los CSFA, se intenta llegar a las familias en riesgo de
pobreza o exclusión social.
Ante esta terrible situación, no podemos permitir que el verano en España y la distancia geográfica nos hagan perder de vista esta trágica situación. Por esta razón, continuamos implementando en Plan de Emergencia Covid 19, intentando paliar los efectos de una pandemia que en Latinoamérica está siendo imposible detener.