La emergencia sanitaria provocada por el Covid-19 está afectando a todas las personas en todas los lugares del planeta, sin hacer distinción de raza, religión, o nivel socioeconómico. Todos estamos sufriendo, ya sea por la enfermedad, o por la crisis económica derivada de la sanitaria, que ha provocado la perdida de millones de puestos de trabajo.
Las crisis siempre golpean más duramente a los más vulnerables; a aquellos que viven dependientes de una economía de subsistencia que tan solo les permite sobrevivir en el día a día. La pandemia está provocando situaciones que superan cualquier realidad que podamos imaginar, debido a la fragilidad en las condiciones de vida de estas personas.
Las hermanas y responsables de los proyectos de MISOL en Bolivia, Perú y España están conociendo de cerca la situación de las familias que apoyan los proyectos, muchas de ellas desamparadas debido a la magnitud de la crisis. Ya sea colaborando con otras instituciones, o bien desde las mismas comunidades, ahora más que nunca MISOL procura estar al lado de los más vulnerables.