En Bolivia, la crisis sanitaria está afectando enormemente a aquellos que antes tenían trabajo, y que como consecuencia de las medidas de confinamiento decretadas por el Gobierno, se han quedado sin él. Allí no existen ayudas ni subsidios; si no hay trabajo, no hay ingresos. Esta circunstancia genera gran inestabilidad y angustia en las familias.
Para aliviar la situación, el Centro San Francisco de Asís de El Alto, a través del Plan de Emergencia ha podido apoyar en sus necesidades básicas a 66 familias. Familias del personal y de los niños que acuden al Centro, y también de los niños con capacidades diferentes.
Desde la dura realidad que están viviendo, nace espontáneo y sincero el agradecimiento de las familias. Gracias a las ayudas, sobre todo en nutrición, pueden salir adelante a pesar de las dificultades, y lo más importante, mantener el ánimo y la confianza esperando que la situación mejores.